1.2.1. Incorporar citas a su historia


Las citas deben destacar un punto, no contar toda la historia, y sirven para agregar información, no para repetirla. Es preferible usar citas no para información básica, sino destacar la conversación con sus fuentes, que no puede reemplazarse con un análisis sobre lo que las fuentes contaron.

En el periodismo de investigación es fundamental reproducir las palabras exactas que usaron sus entrevistados, con excepción de:

  • dichos del entrevistado difíciles de entender o que lo ponen en ridículo y no suman nada al “color” del discurso.
  • groserías y obscenidades, si el medio no las permite.
  • > muletillas, como “mire”, “usted sabe”, “yo pienso”, que son innecesarias y no agregan nada.

Es importante atribuir todas las citas cuidadosamente y citar siempre una fuente para todo aquello que fue directamente observado por el periodista. Un reportaje requiere ser aún más cuidadoso en la atribución de citas porque los lectores juzgarán el valor de la evidencia por la fuente. Debe aclararse el motivo por el que no puede citar una fuente, como por ejemplo, si el entrevistado dijo: “La compañía me echaría si se enterase de que yo le mostré esto”.

Seleccionar y presentar adecuadamente las citas:

  • > El renglón anterior debe ayudar al lector a entender la cita que sigue.
  • > La cita debe apoyar lo que se quiere contar.
  • Las citas agregan valor; por lo que no suma transcribir las palabras irrelevantes o repetitivas.
  • Los verbos de decir son los más precisos para las citas. Otras palabras pueden dar un sesgo (“afirmó”, “exigió”, “adujo”) o ser malinterpretadas por los lectores (“rebatió”, “desmintió”).
  • > La cita no debe ser interpretada, sino que debe ser respetada en el sentido y el tono utilizado por la fuente. Si la vocera dice “No tenemos presupuesto para eso”, no debe ser parafraseada en un interpretación del tipo: “La vocera dijo que su compañía no estaba dispuesta a gastar en eso”.